lunes, 24 de abril de 2017

DESDE LA FINCA

Con ánimo renovado.- Luego del periodo de Semana santa, donde los campesinos asistieron con el fervor característico a todos los actos litúrgicos propios de esta fiesta; desde del Domingo de Ramos donde, cargando a sus chilpayates, acudieron a bendecir la palma porque es importante tenerla a la mano para quemar un poquito cuando la tempestad arrecia. También al “Lavatorio y las siete palabras”, al Vía Crusis, a la Procesión del Silencio y a la misa de Gloria. Después de cumplir como dios manda con esas costumbres heredadas desde los abuelos, las cuadrillas vuelven al jornal, con el ánimo renovado y con la esperanza iluminada.
A continuar las labores en esta tierra bendita de cafetales, flores y miel. La que a pesar de los bajos precios de los productos originados por la especulación y a pesar del cambio climático originado por la irresponsabilidad de muchos, nos sigue dando su fruto con el que unos pocos se enriquecen y otros muchos sobreviven. En el retorno a las laderas con azadón en mano para limpiarles a las fieles matas sus bases, se retoma la charla cordial, el chiflido agudo y la carcajada franca. Se comenta sobre los candidatos, se percibe el entusiasmo por una feria que se espera que cumpla con los artistas anunciados. Algunos conocen a los que van como candidatos a la regiduría primera, se comenta sobre uno de ellos que ya fue regidor y ahora es “asesor” en una importante Secretaría. Todos coinciden en que es un vividor. ¡Qué ha hecho Coatepec como para merecer esto! Porque de los diez candidatos, nueve van a perder, pero por matemática electoral, van a entrar varios regidores que van en la primera posición de cada fórmula. ¡Fíjense bien quiénes son! Conozcan las planillas, eso es tan importante como el alcalde. “Hemos visto cabildos de puro ignorante y aprovechado que solo van por el interés de enriquecerse. Luego no se quejen de que ni a ustedes los toman en cuenta. No voten por ellos.”

Al bastimento sin chahuistle.- Ya a la hora de hacer la lumbre para calentar el bastimento, el más viejo de los campesinos sentenció: “vamos a echar taco, pero que ninguno se le ocurra preguntar pendejadas, como la detención del ratero del Duarte. Que nadie amargue las “dobladas” diciendo que su detención fue pactada o que a su mujer ya la dejaron huir, o que se le debe “enchiquerar” por genocida y por pactar con la delincuencia organizada, tampoco vayan a comentar que van a rodar más cabezas de sus cómplices que se enriquecieron sin medida y que algunos ya están huyendo como las ratas y menos vayan a decir que le daba dos y medio millones de pesos mensuales al “Pejelagarto” para la campaña de Cuitláhuac. Olvidemos por un momento esas estupideces que ya nos tienen hasta la madre y vamos a la masticación tranquilos y sin hacer coraje. Al que se le ocurra le damos de “planazos”.


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