Un xalapeño ilustre

 

Por Sergio Jimarez

El clima de Xalapa es muy característico o por lo menos lo fue en el pasado cuando la humedad y su casi permanente llovizna figuraban a lo largo del año. En la última época se ha marcado con fuerza la diferencia entre las estaciones, tenemos un calor bochornoso en primavera, abundantes lluvias a finales de verano y un intenso frío en invierno. Nuestros padres y abuelos nos pueden contar que Xalapa era de neblina casi cada noche, un ambiente londinense que propiciaba el antojo por un café caliente y pan; a pesar de la linda postal que se describe, ahora o antes Xalapa ha tenido una gran desventaja para todos aquellos soñadores de las estrellas, aficionados o profesionales de la astronomía tienen que salir en busca de un sitio que provee una mejor vista y un ambiente claro para sus observaciones.

En 1833 nació en Xalapa, Veracruz, Francisco Díaz Covarrubias, ingeniero, geógrafo y astrónomo; pionero mexicano en medición y observación directa de fenómenos astronómicos, uno de sus principales aportes fue describir el tránsito de Venus por el disco del sol en Yokohama, Japón en 1874. Este fenómeno ocurre cuando el camino orbital de Venus lo hace pasar entre la tierra y el sol marcando su traslado como si cruzara por el sol en observaciones desde la tierra (como un tipo eclipse solar con Venus en lugar de la luna). Este suceso es poco frecuente ya que la órbita de Venus y de la tierra no son coplanarias y acontece en pares separados por intervalos de ocho años, después de 1874 ocurrió en 1882 y los últimos fueron en 2004 y 2012. La importancia de la observación de este hecho es que sirvió para establecer con mayor exactitud la distancia entre el sol y la tierra.

Díaz Covarrubias también calculó con gran precisión el eclipse solar marzo de 1857 en México, dicho evento le valió un gran triunfo porque este eclipse no se había sido predicho en esa época.

Además de su trabajo como astrónomo, Francisco Díaz Covarrubias hizo una importante colaboración al realizar la carta geográfica del valle de México precisando su longitud y latitud, de igual manera para la ciudad de Querétaro. Estuvo a cargo del Observatorio Astronómico de Chapultepec en 1862 y ante la inminente entrada del ejército francés en su segunda intervención, Díaz Covarrubias desmontó los principales instrumentos del observatorio y los resguardó en San Luis Potosí y Tampico.

Francisco Días Covarrubias tuvo siempre muy presente la importancia de la educación de los jóvenes. Desde el gabinete del presidente Benito Juárez reformó el sistema de educación pública y funda la Escuela Nacional Preparatoria de la cual fue director. En 1867 publica su libro "Nuevos métodos astronómicos para determinar la hora, el azimut, la latitud y la longitud geográficas". En 1870, publica su libro "Tratado de topografía, geodesia y astronomía" dedicado a los estudiantes de la Escuela de Minería. En 1873 publica un libro de matemáticas, “Elementos de análisis trascendente o cálculo infinitesimal", dedicado a los estudiantes de preparatoria. Estos dos libros fueron usados como textos de las respectivas materias por más de treinta años.

Iniciando el mandato de Porfirio Díaz se instaura el Observatorio Astronómico Nacional en 1876 en manos de Vicente Riva Palacio motivado por el éxito de la expedición de las observaciones del tránsito de Venus y en 1878 se reinstala el Observatorio Astronómico de Chapultepec.

Francisco Díaz Covarrubias fue nombrado cónsul de México en París en 1886 y muere en 1889 en aquella ciudad. Sus restos descansan actualmente en la Rotonda de las Personas Ilustres en la Ciudad de México.

Aunque la humedad y nubosidad de Xalapa no permita buenas observaciones del cielo nocturno sí guarda un homenaje en las estrellas, en la bóveda celeste existe un lugar para recordar a todas estas personas que de alguna manera han facilitado el conocimiento del cosmos. Miremos arriba y disfrutemos de pedacitos de historia.