Capuchino
Por
Adolfo Cortés Veneroso.
Hoy
inicio una faceta más en mi vida, la de escribir para un medio de comunicación
como lo es Espresso, Semanario de Coatepec, Pueblo Mágico. Los temas serán
variados, pues como cuando vamos a un café, los temas que ahí se abordan son
diversos: de política, economía, sociedad, y muchos más, todo depende lo que
este en boga en ese momento; pero lo importante es pasar un rato agradable
disfrutando un buen café, y charlar un poco con algún amigo o parroquiano, por
lo que, en esta ocasión abordaré un tema reciente: las elecciones Municipales.
Fueron
doscientos doce municipios, los que a lo largo y ancho de nuestro hermoso
Estado de Veracruz, tuvieron esa efervescencia política, caracterizada por
campañas llenas de propuestas, pero también de ataques entre los candidatos,
ganchos al hígado, piquetes de ojos, jalones de oreja, entre muchos actos. Algunos
irregulares de acuerdo a la ley electoral, pero que al final culminaron
influyendo en el ánimo de los ciudadanos que fueron a emitir su voto, tomando
una decisión importante, ¡muy importante!, pues eligieron a los Ciudadanos y
Ciudadanas que los representarán y trabajaran en proyectos y beneficios para
cada uno de los Municipios en los que gobernarán.
La decisión
está tomada, nuestro Estado ya tiene a los doscientos doce alcaldes que habrán
de gobernar. El partido al que representen podría ser no muy importante, por lo
que si quieren seguir en la carrea política tienen que trabajar en cada una de
sus promesas de campaña, y sobre todo, si quieren que el partido político que
los cobijó y los llevó al triunfo se mantenga en el poder. Es de mencionar que
partidos con poca presencia en el Estado, ganaron algunas alcaldías
importantes, como el partido Encuentro Social en Teocelo, Veracruz, pues al
abanderar a un candidato conocido por la Ciudadanía, y las propuestas de
campaña que puso en cada uno de sus discursos, abonaron en mucho a que fuera el
ganador, promesas que una vez tomada la protesta de ley se deberán de convertir
en proyectos a corto y mediano plazo, pues cuatro años se pasan rápido, y el
ciudadano que votó por él está ansioso de resultados, pues en un Municipio como
Teocelo requiere de mucho, pues hace falta fuente de empleo, caminos, calles
bien pavimentadas, vivienda y servicios básicos como el agua potable y drenaje,
los cuales generarán una buena imagen al visitante que viene a degustar de la
gastronomía de la región, sus tradiciones como las danzas de payasos en las
fiestas patronales, los tapetes de aserrín, su mole, los chinines (fruta de
temporada muy rica), y que cada uno de los que visitan esta zona degustan y
admiran, llevándose en sus corazones la alegría del pueblo de Teocelo, el gran
y enigmático “Dios Tigre”.
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