En
nada beneficia el gasoducto a Coatepec: Mario Rivera
Vecinos del camino a la
Orduña, en voz de Mario Rivera Texon, aseguraron que hay opacidad en la
construcción del gasoducto que se pretende introducir a Coatepec y sólo es un
proyecto entre particulares que sólo beneficia a la Nestlé y a Envases Universales,
empresa filial de la Coca Cola.
Rivera Texon explicó que los
vecinos del Camino a la Orduña no se oponen a la introducción del gasoducto, ni
están en contra del uso de nuevas tecnologías, pues representa una fuente de
energía alternativa para las empresas coatepecanas, sólo se oponen -expresó- a
la opacidad y a la falta de respeto de la Compañía de Autoabastecedores de Gas
Natural de Xalapa, S.A de C.V., que quiso sorprender al tratar de introducir la
tubería, aprovechando la rehabilitación de la autopista Xalapa-Coatepec.
En el evento, organizado por
Morena, se contó con la presencia del alcalde electo de Xalapa, Hipólito
Rodríguez y el alcalde electo de Emiliano Zapata, Jorge Mier; los vecinos
dieron una explicación técnica del porqué no es viable el proyecto,
principalmente porque pasaría por zonas densamente pobladas de los municipios
de Emiliano Zapata, Xalapa y Coatepec.
Con más de cuatro años de
lucha en contra del proyecto del gasoducto, los vecinos del Camino a la Orduña,
expresaron su descontento por la falta de información adecuada a la población, además
no se hizo una consulta pública para saber si los ciudadanos estaban de acuerdo
con el proyecto, no se da a conocer los posibles daños en la población en caso
de un siniestro, entre otras anomalías que se han presentado con el gasoducto.
Asimismo, exigen que, de
llevarse a cabo el proyecto, se haga con responsabilidad, que se vea la parte
social, que se garantice que haya seguridad, y lo más importante que el trazo
por donde pasará la tubería no sea por zonas urbanas, como se pretende hacer
actualmente.
Respecto a lo anterior, el
magistrado Francisco Berlín Valenzuela, durante su intervención comparó el
problema del gasoducto con un silogismo y comentó: “Un gasoducto es una
construcción potencialmente peligrosa; por las casas aledañas a nuestro
domicilio, se quiere pasar un gasoducto; luego entonces nuestras casas estarán
en un probable peligro a futuro”.
Para concluir dijo: “Yo
preguntaría a ustedes si están de acuerdo en que esa tranquilidad de nuestros
hogares sea amenazada por la irresponsable complacencia de las autoridades, que
en la autorización de un proyecto que puede acarrear desgracias previsibles que
llenen de luto a nuestras familias y demeriten el valor de nuestras
propiedades”.
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