Editorial

El tiempo sigue su vertiginosa marcha y lo que para algunos es demasiado lento, para otros pasa rápidamente. A solo una semana del cambio de gobierno en Veracruz, a algunos no les alcanza para medio poner en orden su salida y a otros les urge que acabe noviembre. Finaliza un periodo de gobierno estatal de dos años caracterizado por la insensibilidad y el distanciamiento con la población. Promesas de campaña incumplidas, muchas expectativas y pírricos resultados.

Malas señales para el gobierno saliente hacen percibir que su salida no será del todo tersa. Se suspendió la ceremonia del pasado 15 de noviembre donde daría un mensaje con motivo de su Segundo y último Informe de gobierno. Trascendió que el mandatario decidió no exponerse públicamente ante las reacciones de la sociedad, tras los recientes hechos violentos en la entidad.  Cuando entregó el Informe en el Congreso, los presentes incluidos legisladores panistas, le demostraron que ya no es útil, ni siquiera para ellos, se mantuvieron a distancia incluso aquellos que se sirvieron de él para ser hoy representantes populares. La reaparición de Elba Esther Gordillo y columnas que anticipan acciones de la PGR, complican el escenario. “Muerto el rey…”

Por su parte el gobernador electo de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, adelantó que rendirá protesta al cargo el primer minuto del próximo 1 de diciembre, posteriormente ofrecerá un mensaje en la Plaza Lerdo en Xalapa y luego viajará a la Ciudad de México para estar presente en la ceremonia en la que López Obrador será ungido como Presidente de México.

Con la llegada de Cuitláhuac García Jiménez como gobernador del estado y la mayoría en la legislatura, los ciudadanos esperan que haya realmente un compromiso tanto del ejecutivo estatal como de los legisladores, para trabajar realmente en beneficio de los veracruzanos.

Ya se había anticipado que Andrés Manuel López Obrador había elegido al estado de Veracruz como su primer destino fuera de la capital del país, luego de rendir protesta como Presidente de la República el 1 de diciembre, además, que una de sus primeras acciones será respaldar la declaratoria de “crisis humanitaria” que el gobierno de Cuitláhuac García hará para Veracruz, debido a la inseguridad y al desfalco financiero. El día 2 de diciembre López Obrador visitará Veracruz acompañado de integrantes de su gabinete para tratar temas de derechos humanos, en compañía de Cuitláhuac García, quien anunció que pedirá el auxilio de varios organismos internacionales, como la ONU, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Cruz Roja Internacional. 

Inicia una nueva etapa para Veracruz. La suerte está echada.

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