Por: Yamileth Abigail Hernández Ramirez
Este domingo 18 de junio se le
celebra al papá su día, muchos lo saben y muchos otros quisieran no saberlo.
¿Qué representa una figura paterna en los jóvenes? Todos nosotros tenemos una
figura paterna distinta, algunos dicen que tienen el mejor papá del mundo,
otros ni siquiera lo conocieron, otros más guardan resentimiento hacia él y
otros aunque no viven con él, le tienen aprecio o respeto.
La figura paterna es más que
indispensable para el ambiente familiar, aunque ahora se reconozca que la madre
puede ejercer los dos papeles sin ningún problema. Pero la presencia de un papá
en la familia ayuda a los niños desde pequeños a forjar su autoestima y
satisfacer necesidades psicológicas profundas como el sentido de pertenencia.
Cuando somos pequeños de
manera inconsciente plasmamos a nuestro padre como una figura de más autoridad
y firmeza, pero lo más interesante es que si la figura paterna y la materna son
equilibradas, los niños se vuelven más seguros de sí mismos, tienen más
autocontrol, tolerancia y llegan a sobrellevar la frustración.
También existen los
padrastros, para los cuales se utiliza mucho la frase de “padre no es el que
engendra sino el que cría”. Existen casos donde el padrastro cumple las
funciones exactas que debería cumplir el padre biológico, y en este caso el
niño o joven se siente parte de una familia completa y agradable; en otros
casos el niño o joven no acepta que alguien pueda sustituir a su verdadero
padre y se vuelve rebelde y problemático en la familia.
Un papá es todo amor hacia sus
hijos, aunque a veces parezca que es el “ogro” del cuento, siempre busca lo
mejor para sus hijos, los ayuda en lo más que puede y trata de darles todo lo
que a él quizá le falto cuando le toco ser hijo. La importancia de un papá es
la educación que aporta en su hijo, en las habilidades y límites que en él ve y
en ese sentimiento de amor.
En la actualidad un papá es el
que logra hacer equipo con mamá, el que logra sustentar económicamente el hogar
y dedicarles tiempo a sus hijos, los dos deben percatarse de dar el mejor
ejemplo a sus hijos para dotarlos de herramientas para vivir feliz. Un papá
debe establecer las reglas y hacerlas en cierta forma respetar, y en dado caso
si no se llegan a respetar están
encargados de advertir.
Pero también se puede
mencionar que ahora los jóvenes no asumen al cien por ciento una
responsabilidad preventiva y si aun sabiéndolo resulta que la novia tiene un
embarazo no planeado, es donde él tendría que dejar la escuela y ponerse a
trabajar para sustentar ese nuevo ser, porque de otra manera si no se hace
responsable dejaría a su novia como madre soltera.
A nosotros los chavos
milleniales aún nos tocó vivir el papá rígido, recto, autoritario y quizá hasta
machista, hasta cierto grado educativo y racional. En nosotros también está el
cambio, pues ahora la forma de ser de un “papa” es jugar, darle amor, darle lo
que necesita y ayudar a desarrollar un hogar con su novia futura esposa. Al
parecer los valores de un buen padre se están conservando.
“Cualquier hombre puede llegar
a ser un padre, pero se necesita un hombre especial para ser llamado papá; en algunos
casos los dos es el mismo”.
¡Feliz Día del Padre…!
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