La mayoría de nosotros en algún momento en la revisión o tratado de nuestras plantas nos hemos topado con estos insectos o incluso ni nos percatamos de su presencia, ya que como sabemos son idénticos a las ramas de las plantas, cuando los vemos lo primero que hacemos con todo insecto es matarlo ya que creemos que nos picará y nos hará daño.
A algunos de nosotros nos han hablado sobre este insecto que si te pica te dará una fuerte temperatura y dolor, que incluso te puede llevar a la muerte.
Para comenzar debemos saber que el insecto palo se deriva de la familia de los “fásmidos” de la cual se conocen unas 2500 especies, donde también proviene el insecto hoja y demás especies conocidas como estas. Debemos saber que cada uno tiene rasgos diferentes ya que como su nombre lo indica el insecto palo es realmente parecido a uno y el insecto hoja es igual a una hoja, pero bueno en este caso nos centraremos en el insecto palo.
Ahora sí, para comenzar debemos conocer que su alimentación se basa en ser herbívoros, lo cual hace que estos insectos se encuentren en la planta ya que de esta se alimentan. Al llegar la edad adulta no suelen separarse de esta, solo en caso de que quieran cambiar de planta para lo cual no caminaran a más de 2 metros ya que suelen ser muy perezosos y en caso de cambiar de lugar, solo lo harán por la noche ya que por el día corren riesgo que los veamos o los casen sus depredadores.
En cuanto a demás datos sobre esta especie debemos saber que los fásmidos cuentan con seis patas, dos antenas, y su cuerpo está dividido en tres segmentos, los cuales son: cabeza, tórax y abdomen y casi todos los insectos palo tienen un cuerpo diseñado no sólo para movimientos o eficiencias, sino también para camuflaje; ya que su cuerpo y sus patas son elongadas para imitar una varita o un popote. Y pueden llegar a medir desde los 10 a los 12 centímetros.
Este insecto cuenta con una reproducción ovípara y cabe mencionar que es mentira que si nos pican nos ocasionaran una elevada temperatura y dolor, los insectos palo no te puede lastimar, no tienen púas ni veneno. Sólo algunas especies sí tienen espinas en sus piernas diseñadas para pinchar a sus depredadores. Aunque este pellizco sí duele y te puede sacar sangre, no puede hacer más que eso. Así que, si ahora en tu camino te encuentras a uno, no lo mates, solo déjalo ahí, es completamente inofensivo ya que ni siquiera se moverá a menos que lo molestes.
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