martes, 8 de octubre de 2019

Adictos a la distracción Por Jesús Ricaño Herrera



Cada vez que Mariana revisa su teléfono celular busca una notificación, respuesta a la imagen, vídeo, sticker, meme, mensaje o etiqueta que colocó en las redes sociales, esta le dirá que lo hizo bien, que causó gracia o que motivó una reacción en los demás.

Al recibir la aprobación de los otros o un comentario (aunque sea negativo) una sensación de satisfacción y alegría invade a su cuerpo, es por ello que cada vez que percibe que tiene un mensaje nuevo o una llamada telefónica no puede resistirse a tomarlo y verificar qué le ha llegado.

Mariana, como muchas personas en el mundo es adicta al teléfono celular y a las redes sociales. Deje le explico, utilizando el siguiente esquema que relaciona y describe a la dualidad estímulo-respuesta:


1. Llega el estímulo a la persona a través de los sentidos,

2. El hipotálamo, la glándula pituitaria y las glándulas suprarrenales segregan neurotransmisores, mensajes químico-eléctricos para echar a andar al sistema nervioso central y periférico, para a su vez distribuir en las zonas donde haga falta la sustancia sintetizada y preparar al cuerpo para una respuesta, ya sea de lucha, huída, asunción y resolución

3. Atendida la respuesta, esta deja una sensación en todo el cuerpo, hay satisfacción, placer, gozo y alegría.

4. Surge el deseo o la necesidad de repetir el proceso.

5. La adrenalina, dopamina, endorfina y oxitocina son drogas que generan adicción.

Esto viene a describir el por qué hay almas adictas al peligro, las peleas, las apuestas, las cirugías, el enamoramiento, al sexo, al ejercicio, a las redes sociales, los videojuegos y al teléfono.

Como puede usted darse cuenta, la nomofobia (la adicción al teléfono móvil) es un problema muy grave, este no sólo se refleja en el rendimiento laboral, académico, personal, emocional y hasta sentimental de los individuos, sino que en materia de accidentes viales, tenemos hoy día como número 1 al uso de teléfono celular como causa de accidente, dado que absorbe la atención del conductor, dejando de lado al consumo de alcohol y pasándolo al puesto número 2.

Haga lo humana y racionalmente posible por renunciar a realizar llamadas, contestarlas, leer mensajes o redactarlos de todas las plataformas sociales mientras conduce, la seguridad de todos está en juego, la infracción no es la última consecuencia, a una desgracia debiéramos temerle.

Le agradezco el favor de su tiempo al leernos, tenga buen día y buen trayecto. Comentarios a: jojerihmx@gmail.com

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