Cerca
del Cielo.
Por:
José Ramón Flores Viveros.
Santo,
el Enmascarado de Plata. III Y ÚLTIMA PARTE.
Ganó más de 50 mascaras… A
lo largo de su carrera el Enmascarado de Plata ganó más de cincuenta máscaras,
el record más grande de la lucha internacional; y también tuvo más de treinta
cabelleras, lo que es sin duda una impresionante cifra, pues no se conoce a
nadie que ganara más duelos de apuestas que él. Dentro de las máscaras que ganó,
destacan, aparte de la de Black Shadow, la del Espanto, Lobo Negro, Espanto II
y muchos más, en la impresionante lista de víctimas del inolvidable profesor.
Las mejores parejas del
Santo.- Durante la década de los cincuenta, El Santo comenzó a
formar equipo con uno de los rudos más cotizados de aquel entonces, Salvador
“Gori” Guerrero también conocido como “El Ave de las Tempestades”. Otros de los
luchadores con los que “El Profe” hizo buenas mancuernas fueron El Enfermero,
El Gladiador, Pancho Valentino, Chico Casasola, Emilio Charles, Black Guzmán,
quien además era su hermano, Humberto Garza, Black Shadow, su terrible enemigo,
y con Blue Demon. Un Dato de verdad insólito, es que en aquellos años de
gloria, El Plateado, lucho temporalmente en los E.E.U.U, sin mascara.
El Santo el ídolo del cine.-
Sin
lugar a dudas, uno de los factores que logró consolidar al Santo como el máximo
ídolo del pueblo mexicano, fue el cine, en sus películas el Enmascarado de
Plata plasmó lo que el pueblo de México quería ver, un ídolo que defendía las
causas nobles, que ayudaba a los necesitados, pero sobre todo un héroe que
existía en realidad que era de carne y hueso. Esta fue una de las razones
también por las que el rudo luchador, tuvo que emigrar al bando de los científicos.
Fue una obligación moral.
Solo el Santo y Pedro
Infante.- A lo largo de su carrera dentro del séptimo arte, el
Santo filmo 44 películas en plan estelar, una cifra solo superada por Pedro
Infante, lo que demuestra que el Plateado fue un verdadero fenómeno, quizás
solo fue un mito publicitario, pero se llegó a decir que las películas del
Santo fueron en su momento, más taquilleras que las del mismo Cantinflas.
Durante las décadas de los sesentas y setentas, las películas del Santo fueron
las más taquilleras en el cine nacional, filmes como Santo vs Los Monstruos,
Santo y Blue Demon en el Triángulo de las Bermudas, Santo vs Las Brujas, Santo
vs Drácula, Santo vs El Espectro del Estrangulador, Santo vs El Hacha Diabólica,
y muchas, muchas más, rompieron records de asistencia en las salas de México y
en salas de toda América Latina.
Provoco el derrumbe de un
cine en Paraguay.- Un episodio trágico, pero elocuente en
cuanto a la fama del Santo, fue lo sucedido en una pequeña provincia de
Paraguay, cuando se presentó Santo vs las Lobas, en cuanto la pusieron en
cartelera la gente se volcó en gran cantidad en las salas. Y el pequeño cine
provinciano no pudo soportar la presión de la gente -ya que hubo sobrecupo-, y
parte del cine de desplomo; afortunadamente, no hubo víctimas.
La hora del adiós.- Todo
tiene un final y una tarde de 1982 en el Toreo de Cuatro Caminos- lleno a su
máxima capacidad, no cabía ni un alfiler- el Santo dijo adiós a la lucha libre,
sus compañeros de aquella épica batalla fueron Huracán Ramírez, El Rayo de
Jalisco y Gori Guerrero, y sus adversarios, los desalmados Misioneros de la muerte.
El Signo, El Texano, El Negro Navarro y el Perro Aguayo y para quienes piensan
que la lucha libre es gran parte teatro, el Enmascarado de Plata salió casi inconsciente,
rumbo al hospital, producto de la salvaje golpiza que le propinaron estos
desalmados gladiadores, quienes no respetaron la fecha histórica del legendario
luchador, ni tampoco su condición de máxima gloria de este deporte en México. Incluso
se llegó a especular, que el Santo tuvo que recibir reanimación cardiaca, al
haber entrado en principio de infarto, por la salvaje golpiza recibida arriba
del ring. Mito o realidad esto último relatado, la Leyenda Plateada, no pudo
retirarse de otra manera más espectacular y dramática…
Tomado de la Revista Arena
de Lucha Libre, Febrero 1 de 1994.
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