Héctor Hernández Parra
“Diciembre me gustó, pa’que te vayas
que sea tu cruel adiós,
mi navidad”
José Alfredo Jiménez
Este
sentimiento de despedida lo compartimos los habitantes de varios municipios
veracruzanos, quienes padecimos los estragos, abusos y excentricidades de
servidoras y servidores públicos que en los ayuntamientos de la región hicieron
y deshicieron a sus anchas.
En
Coatepec padecimos patéticamente de un gobierno municipal que dio de sí al
autoritarismo de un des gobernador del Estado que violentó el marco jurídico
entre tantas cosas al instaurar el Mando Único, la presencia de la Fuerza Civil
que no tuvo otro propósito que servir de distractor para que la inseguridad
sentara sus operaciones en nuestro Pueblo Mágico.
Un
crimen no aclarado de un funcionario municipal, desencadenó una serie de
acontecimientos que complicaron el ejercicio de una administración plagada de
intereses personales y de grupo.
La
situación financiera en la Hacienda Municipal se visualizó difícil, como
consecuencia de los abusos presupuestales en los tres niveles de gobierno. No
obstante, es evidente el enriquecimiento de unos cuantos y la avidez para
improvisar fortunas.
Como
botón de muestra para el recuerdo de tantos y tantos agravios.
La
presencia del Movimiento Antorchista en Coatepec y el enorme montaje de un
escenario ubicado en el Centro Histórico situación que generó el hartazgo electoral
con las consecuencias conocidas por todos.
Ahí,
el ciudadano presenció y captó el mensaje que el manejo de la pobreza y la
carencia se vistió, se congregó bajo la
conveniencia del liderazgo político de Antorcha Revolucionaria. Una muestra
evidente de quienes gobernaron la situación.
A
unos días del cambio de administración municipal, los coatepecanos volvemos a
encontrar calles con severos hundimientos, banquetas obstruidas para el peatón,
contenedores rebosantes de basura, nuestro parque central es un gran mercado
habitado y aprovechado por payasos, puestos y merolicos. La indolencia
gubernamental en materia de imagen urbana, la degradación del Medio Ambiente, el
encarecimiento de los servicios municipales, algunos de ellos pagados por anticipado,
así como el enorme negocio de la especulación de la tierra que complicará la
problemática urbana. La oportunidad de rescatar a Coatepec llega lentamente.
La
bienvenida para los nuevos servidores que reciben la problemática coatepecana.
“Coatepec, Tierra del Liquidámbar
Del Jinicuil y el Naranjo”.
María Enriqueta
Camarillo y Roa
Contacto:
hectorhernandezparra77@gmail.com
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