El reino animal nos brinda un abanico enorme de seres que habitan todo el planeta, tenemos ballenas gigantes nadando en los océanos y millones de insectos viviendo en nuestros jardines. El respeto por la naturaleza y por todos los animales debe ser uno de los principales valores que ejerzamos los humanos y es que cada uno tiene su lugar y función para que el ciclo de la vida se complete día a día.
Las especies animales han causado gran fascinación por millones de años, hemos tenido compañía, alimento y vestido gracias a ellas, y por otro lado, hemos tenido que resguardarnos y cuidarnos de otros animales ya que podemos terminar siendo su alimento o pasar un mal rato.
Cada año, miles de personas mueren a manos de ciertos animales, pensaríamos que entre más salvaje, más mortífero resulta ser pero lo cierto es que el animal que más muertes ha provocado a lo largo de los años es el mosquito, este pequeño insecto es el causante de enfermedades como el paludismo, fiebre amarilla, zika, malaria y dengue, este último es el que nos ha tenido en jaque los últimos años en el país y más porque Veracruz es el estado con mayor casos reportados.
El dengue es una enfermedad provocada por un virus que transmite el mosquito Aedes aegypti, existen cinco variantes del virus y dependiendo el organismo donde se incube puede presentar diversos síntomas que pueden confundirse con un resfriado en los casos simples o hasta presentar un cuadro clínico muy grave que puede llegar a ser mortal.
Cuando el virus entra en el cuerpo empieza a reproducirse por lo que el organismo envía los anticuerpos a combatir al intruso; todos los síntomas que el enfermo muestra no son más que las reacciones del trabajo del sistema inmune. El virus hace un verdadero problema porque invade todo el organismo y en casos graves provoca fallas en órganos importantes como el hígado. Aunque el dengue no es como tal una enfermedad mortal, sí puede complicarse por lo que no debe tomarse a la ligera si se presentan los síntomas característicos como es el dolor de articulaciones, dolor de cabeza y fiebres; y sobre todo, se debe evitar la automedicación.
Una variante de este padecimiento es el dengue hemorrágico, no se sabe a ciencia cierta por qué se llega a derivar en esta complicación pero algunas investigaciones han demostrado que cuando una persona es infectada por uno de los cinco tipos de dengue se vuelve inmune contra este, pero no contra los otros cuatro y que al ser infectado por otro tipo distinto del que ya tiene inmunidad, la enfermedad impacta con mayor intensidad y en la mayoría de los casos se presenta el tipo hemorrágico.
Es importante saber que este no se debe a que ciertos medicamentos lo convierten del dengue tradicional pero en caso de padecer el hemorrágico, los medicamentos contraindicados sí pueden agravar la enfermedad y conducir a la muerte.
Las primeras acciones que debemos tomar contra esta enfermedad empiezan en casa, los criaderos de mosquitos son todos los lugares donde se almacena agua por lo que es importante mantener seco cualquier sitio que sirva de depósito, la limpieza y el orden nos pueden ayudar a que el mosquito no se reproduzca, además, se sabe que los mosquitos se alimentan en un espacio menor a cien metros del lugar donde nacen, los machos se alimentan de savia de las plantas pero las hembras que son las que se alimentan de sangre y las que transmiten el dengue al no encontrar alimento cerca pueden viajar hasta tres kilómetros, es por eso que se dice que el mosquito que nos enferma es el mismo que nosotros criamos.
El cuidar nuestro entorno siempre ayudará a mantener una ecología sana, aunque cada ser vivo tenga una tarea por realizar, podemos respetar cada espacio y al mismo tiempo cuidar de nosotros.
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