El próximo miércoles, 18 de marzo, estaremos recordando el 82 aniversario de la expropiación petrolera realizada por el General Lázaro Cárdenas del Río en 1938. A 82 años del Decreto de Expropiación del petróleo mexicano, que se encontraba en manos extranjeras, se rememora la osada decisión del presidente Cárdenas de recuperar una de las más grandes riquezas naturales del país. Decisión que fue una verdadera hazaña, debido a que era oponerse a los fuertes intereses económicos de empresas de países poderosos como Estados Unidos.
El paso dado por Lázaro Cárdenas con la expropiación petrolera mejoró en gran medida al tesoro nacional, cuyo monto fue utilizado para impulsar programas de desarrollo de carácter nacional, entre ellos el reforzamiento y ampliación de servicios del área educativa. Memorable fue la creación del Instituto Politécnico Nacional (IPN), fundado en 1938. El erario en el gobierno cardenista dio inicio con 44,450 millones de pesos y las ganancias aportadas por la industria petrolera al final del mandato dejó un presupuesto de 73,800 millones, cantidad que fue administrada en atención a las necesidades sociales.
Se trataba de un proyecto que empoderaría a la nación mexicana durante la gestión de Cárdenas en la Presidencia. Por ello, Petróleos Mexicanos (Pemex) fue creada tres meses después, mediante decreto, también, del presidente Lázaro Cárdenas del Río el 7 de junio de 1938 con la finalidad de explorar y explotar los recursos energéticos como gas y petróleo en suelo mexicano. Con los años, Pemex se consolidó como una empresa hegemónica en nuestro país, pero también vinculada con casos de corrupción y poco rendimiento.
El petróleo siempre será tema importante, como en esta semana, que ha sido noticia con una caída del 30 por ciento en los precios lo cual ha padecido su baja más fuerte desde la Guerra del Golfo pérsico en 1991, debido a la ofensiva de Arabia Saudita en la guerra de precios de ese mercado. Esto, y la amenaza del Coronavirus, han afectado los mercados financieros del mundo, lo que incluye a la Bolsa Mexicana de Valores. Esto traerá una consecuencia con la reducción en los ingresos petroleros por las exportaciones que hace Petróleos Mexicanos (Pemex) y sobre las cuales le paga a Hacienda, desde luego sería objeto de riesgo para el presupuesto 2020, pues de no llegar a lo establecido, afectaría los programas sociales.
El petróleo le dejó a México, a raíz de la expropiación, una importante generación de recursos para construir carreteras, hospitales, escuelas e infraestructura. Sin embargo, no se puede negar que, entre los grandes beneficiarios están los líderes sindicales y funcionarios que han hecho grandes fortunas en detrimento de todos los mexicanos, pues en la práctica, en los últimos 40 años sólo perteneció a unos cuantos que echaron mano de Pemex sin importarles el daño al país y que, ahora en quiebra, es una empresa anacrónica en vías de extinción.
Pese a todo, la Empresa Productiva del Estado (Pemex) sigue siendo un estandarte y elemento simbólico que continúa contribuyendo a la economía nacional.
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