Polvo del Sahara, ¿cómo llega a nuestro país?
Este año este fenómeno ha obtenido mayor atención
debido a que puede representar un peligro por las complicaciones respiratorias
que se pueden sumar a las preocupaciones de la contingencia por el nuevo
coronavirus. Cabe aclarar que este es un fenómeno común, forma parte de los
ciclos de la naturaleza, ocurre varias veces al año, pero este año se ha formado
una nube de polvo de las más densas.
Pero, ¿a qué se
refieren con el Polvo del Sahara? ¿Por qué podría ser un riesgo? El polvo del Sahara
es una masa de aire muy seco y
lleno de polvo del desierto norafricano que forma una nube generalmente
de entre 3 y 5 kilómetros de espesor y se encuentra a una altura de entre uno y
dos kilómetros en la atmósfera. Se pueden observar como una niebla que reduce
visibilidad y deposita una capa de polvo sobre cualquier superficie, tambien se pueden observar
desde el espacio por satélites y se aprecian como nubes con un color desde el
crema al gris, que cada año llega al continente americano.
El Desierto del Sahara es
el más grande desierto cálido en el mundo, se encuentra en el norte de África y
ocupa casi toda esa regíon de ese continente, tormentas y corrientes de viento se
originan en esa zona las cuales levantan arena y polvo de este desierto, al ser
aire caliente este asciende a la atmósfera, según la Administración Nacional
Oceánica y Atmosférica de EE.UU. año con
año, más de 100 millones de toneladas de
polvo sahariano se levantan desde el desierto, el cual luego es acarreado por
los vientos alisios, aquellos que soplan permanentemente entre los trópicos de
este a oeste. En este viaje cruzan el océano atlántico recorriendo más de 7,500
kilómetros hacia el Caribe, muchas de estas partículas caen en las aguas del mar
o se depositan con la lluvia, llegando un porcentaje muy reducido al continente
americano.
Puede representar un poco de peligro para las personas
que tienen problemas respiratorios como asma o alergias, ya que el polvo
contiene otras partículas además de arena como: bacterias, virus, esporas, hierro, mercurio y pesticidas y lo
que podría significar un riesgo mayor al contraer enfermedad por el nuevo
coronavirus, así que debemos tener cuidado con este asombroso fenómeno
meteorológico y seguir las recomendaciones de salud.
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