domingo, 20 de mayo de 2018

Cafeteando - Por: A. Emilio Polanco Servín


Ramón de Campoamor
De lo más grande en el parnaso Hispano


La originalidad de este genio del verso en español, que nació en Asturias de Navia, el 24 de septiembre de 1817 y murió 1901; cultivo la literatura en expresiones varias, también fue un filósofo de altos vuelos.
Este poeta de exquisita sensibilidad, humorista que te gana al motivar emociones, se muestra en sus obras como psicólogo, que va burla burlando sobre las debilidades de pulsos que agitan el corazón humano.
Veamos, algunas de sus joyas literarias que en versos son sencillamente maravillosos: 

LOS EXTREMOS SE TOCAN
Mientras la abuela, una muñeca toca 
y haciéndose la niña se consuela; 
haciéndose la vieja, usa la niña,
el báculo y la copia de su abuela.

LAS BUENAS PECADORAS
Después de días de tormentas llenos, 
Te vi en misa rezar con santa calma, 
y dije para mí: ¡del mal el menos: 
da el cuerpo al diablo, pero a Dios el Alma!

MORIR ES DORMIR
Una niña decía: 
¡Madre!, ¿qué es una muerta?
¡Una muerta, la madre respondía,
es la que duerme y que jamás despierta.

LA COPA ETERNA
De las penas de muerte que ejecuta
 nuestro destino impío,
 en Sócrates  se llama la cicuta, 
en Cristo hiel y en los demás hastió.

“No cabe duda, Campoamor 
es eterno, tratase de un señor, 
grande en poesía 
por lo que es grave error 
el no leerlo, yo lo recomiendo como guía.”
(Esto es mío).

¡BUENA SUERTE!


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