Desde el observatorio ciudadano o sea desde la percepción que tenemos los electores que ejercimos el derecho de seleccionar a quienes deben conducir y administrar los recursos públicos y con ello delinear los destinos de los municipios que pertenecen a nuestro entorno regional, resulta interesante observar algunas situaciones que se presentan. Tomemos como materia de análisis el desempeño de los ediles en alguna localidad cercana.
En lo personal me llama la atención lo que ocurre en Teocelo. El desempeño de los ediles, la productividad de gestión para mejorar eficientemente el Bien Común que está gestando el desarrollo.
Temas como el Buen Gobierno, la Transparencia y la toma de decisiones en un municipio donde la célula básica de gobernar se da en un ambiente oficial marcado por la tensión y la desconfianza, ya aparecen elementos que frenan el buen desempeño.
Un Presidente Municipal, la figura del Síndico y el complemento de un solo edil, en teoría la figura municipal de Cabildo, en su mínima expresión.
En el marco de la normatividad correspondiente, lo escrito, lo publicado y lo que está listo para acatarse, se supone que no hay situaciones que compliquen la sana convivencia.
Lamentablemente, resulta muy complicado vivir la triste realidad cuando aparecen diferencias de opinión, distanciamiento de criterios y, de inicio, la aparición de bandos con objetivos encontrados.
Es entonces donde el ciudadano comienza a descubrir que el anhelado cambio en la manera de administrar la municipalidad sigue fracasando. Duele observar cuando aparece la simulación y la manipulación que contrastan con las necesidades que se quedarán plasmadas en el Plan Municipal de Desarrollo.
Muy lamentable que el regidor Luis Valencia López tenga que ser relegado por buscar la Transparencia, la legalidad, la parte humana y sensible en Teocelo, muy grave ha sido vivir el despojo de sus comisiones edilicias.
Precisamente, las circunstancias dibujarán el futuro político para el alcalde y la Sindica.
El electorado tiene frente a si, una muestra local que la 4T municipal sufre una de sus más angustiosas derrotas en la práctica.
El ausente y positivo manejo de conflictos, la insensibilidad ubican el futuro de una oportunidad exitosa fallida.
Sea dicho con el mayor de los respetos para los habitantes de la Tierra del Dios Tigre, su barranca, su biodiversidad y la hermosura del vergel veracruzano, sigue esperando que sus hijos la hagan florecer.
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