La falta de equipo de protección sanitaria personal, desabasto de medicamentos y carencia de instrumental clínico adecuado, limita el trabajo de los profesionales de la medicina en el estado de Veracruz. La pandemia del coronavirus (COVID-19), pone sobre la mesa la crítica escasez de insumos y agudos problemas de suministro.
La emergencia sanitaria coloca en la balanza de la eficiencia a los profesionales de la medicina y exhibe la debilitada capacidad de respuesta del sector salud. Más de 150 trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), interpusieron amparo ante juez federal por la falta de equipo de protección en hospitales, clínicas y centros de salud pública.
Los Servicios de Salud de Veracruz (SESVER), dieron de baja a cuatro empleados del Centro de Alta Especialidad “Doctor Rafael Lucio Nájera” por el uso en fiesta privada de equipo de protección para pacientes sospechosos o confirmados por el coronavirus, donado por la comunidad judía del país.
Una investigación basada en certificados médicos de muerte y actas de defunción, registran que los fallecimientos en las llamadas zonas críticas como Coatzacoalcos, Minatitlán, Veracruz, Córdoba, Orizaba, Xalapa y Poza Rica, se deben a cuadros de hipertensión arterial, obesidad, diabetes mellitus, tabaquismo, neumonía y coronavirus.
A pesar de la falta de equipo técnico, humano, medicamentos y agresiones verbales a miembros del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSS), los profesionales de la medicina cubana y mexicana laboran en beneficio de la población de Veracruz. La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas en México (ACNUR), en coordinación con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), identificó a 114 extranjeros procedentes de centro y Sudamérica, entre mujeres y hombres, especialistas en medicina general, interna, enfermeros y paramédicos, que después de obtener la residencia permanente, forman parte importante de los cuadros médicos en el combate al coronavirus.
Es casi un hecho que parte de este personal voluntario arribe en próximas semanas a la entidad, para reforzar el trabajo de los galenos mexicanos, cubanos y de centro y Sudamérica. El número de contagios y fallecimientos, aumenta cada semana en las zonas norte, centro y sur.
Las carencias observadas en instituciones hospitalarias son muchas, de las que destacan: ventiladores no invasivos, ventiladores mecánicos invasivos, monitoreo de signos vitales, concentradores de oxígeno, pruebas para el diagnóstico del coronavirus, cubre bocas, mascarillas, lentes protectores, caretas, toallas desechables, trajes especiales, guantes de nitrilo, contenedores de desechos, trajes tipo Tyvek, caretas protectoras, overoles y cubre zapatos.
En cuanto a la escasez de medicamentos se encuentran: hidroxicloroquina, avigan comprimidos, clexane, dexametasona, azithromycin, paracetamol y la suspensión de tratamientos oncológicos a niñas y niños.
La demanda de camas de hospital con ventilador para pacientes graves sube a la par de médicos, enfermeras, operadores de ambulancia, camilleros, intendentes y laboratoristas. El avance del coronavirus, aumenta a pasos acelerados en el estado de Veracruz.
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