En medio de las restricciones por la pandemia, que ha generado la suspensión de celebraciones, este lunes 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, cuyo origen se remonta al siglo XIX. Formalizada por la ONU en 1975. Este año, el tema es “Mujeres líderes: Por un futuro igualitario en el mundo de la COVID-19”.
Se dice que no es un día para celebrar, pero se trata de reconocer que las mujeres históricamente han tenido que enfrentar, en muchos casos, discriminación, opresión e injusticia y que la lucha por una sociedad más igualitaria, continúa.
La historia de este día que reconoce al género femenino es amplia. Desde logros y triunfos, hasta hechos atroces y tragedias. Las arengas tocan temas y palabras como: derechos, igualdad, empoderamiento, justicia o paz. O también otros deshonrosos como lucha, violencia de género, discriminación y hasta feminicidios.
En Semanario ESPRESSO, no queremos dejar pasar esta fecha para expresar respeto, reconocimiento y admiración, a todas las mujeres que día a día con su participación en casa, en el trabajo, en familia y en la sociedad, demuestran que tienen la fuerza, decisión y carácter para formar un mundo mejor para todos. Reconocimiento que debe ser permanente, no un solo día.
Cada mujer es única, porque cada una encontró con el tiempo, su propia forma de ser. Algunas son niñas consentidas, otras, las defensoras de todos; y sin importar qué papel hayan asumido en la vida, hoy todas son dignas del más profundo homenaje. Celebremos a las mujeres que siempre nos han acompañado.
Celebremos primero, a la más importante, a la que nos enseñó cómo funciona la vida y cuál es nuestro rol en ella, feliz día a todas las mamás porque ellas han sido nuestro primer modelo, nuestro consuelo, nuestras maestras y protectoras. Feliz día para esa mujer fuerte a la que conocemos y tenemos la suerte de tener al lado; la novia, la amiga, la compañera, la esposa. Porque el mundo necesita más mujeres que sean capaces de lograrlo todo, para mostrarnos que aunque no sean grandes ni fuertes, sí son poderosas porque la fuerza la llevan en el corazón.
Este es un homenaje, también, para esa mujer a la que la vida le ha puesto todas las barreras; porque son ejemplo de perseverancia trabajo y valor, con lo que nos sacan adelante. Celebremos a la mujer que nos enseña todos los días: a las líderes, a las maestras, a las doctoras y enfermeras, a las profesionistas. A las artesanas y a las que venden en la calle. Porque todas son ejemplos de dignidad y virtud.
Feliz día para las mujeres felices, las que sueñan despiertas, las que sonríen sin razón, las hermosas, las ancianas, las indígenas; pues son la brújula de la vida cuando los días están oscuros; porque ellas están ahí para mostrarnos la felicidad.
Y feliz día a la niña alegre, a la joven a la que debemos respetar y cuidar, para la dama que es luz en la vida, la madre soltera y la abuela increíble. Feliz día para ti, que eres leal, cómplice, compañera de vida y amor, que significas todo lo que representa la creación de Dios… El mundo sería mejor, si las valoráramos más… ¡Feliz día para todas, feliz Día de la Mujer!
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