HEROÍNAS DE LA NATURALEZA
El día 20 de mayo fue decretado por la ONU como el Día Internacional de las Abejas. El objetivo de esta celebración es sensibilizar a la población sobre el papel esencial que juegan las abejas en el mantenimiento de la salud del ser humano y del planeta, además de dar a conocer los desafíos que enfrentan para su supervivencia.
Se celebra desde el año 2018 y se eligió este día en honor al natalicio del pionero de la apicultura moderna, Anton Jansä cuya tradición familiar es la apicultura en Eslovenia.
Las abejas aparecieron hace 100 millones de años. Los egipcios descubrieron su uso antiséptico al utilizarla para curar heridas así como para conservar cadáveres dentro de recipientes de miel. Los griegos y romanos practicaron la apicultura y utilizaban el polen, miel y cera para usos medicinales y culinarios.
Estos seres vivos se encuentran en todo el planeta en donde hay plantas con flores, excepto en la Antártida donde no encontramos flores ni abejas. Ellas se alimentan del néctar y usan el polen como principal fuente de energía para sus larvas. A partir del néctar y de una enzima llamada invertasa, que está en su saliva, producen la miel que almacenan en la colmena para utilizar cuando sea necesario.
Pero ¿Por qué son consideradas heroínas? Veamos, ellas son las criaturas más laboriosas del planeta, llevan siglos beneficiando a las personas, plantas y medio ambiente. Gracias a su trabajo de transportar polen de una flor a otra, ayudan a la producción del 75% de frutas, verduras y semillas que consumimos. Esto quiere decir que sin abejas, no tendríamos más de la mitad de los alimentos que disfrutamos. Además de esto, ayudan a mantener un equilibrio en los ecosistemas, incrementa su biodiversidad, ayudan en la producción agrícola al incrementar alimentos, además de proveerlos de micronutrientes necesarios para el ser humano. Incluso su cuidado y mantenimiento mediante la apicultura sirve de apoyo en medios rurales creando empleos dignos.
Sin embargo desde el año 2006 apicultores de Estados Unidos y Europa observaron desaparición de abejas. En estos últimos 20 años han disminuido las poblaciones de al menos 4 especies de abejorros en Norteamérica. El uso incontrolado de pesticidas, fungicidas, herbicidas, abonos químicos así como la invasión de parásitos y hongos ha provocado su muerte. Tan solo en la Ciudad de Oregón, Estados Unidos murieron 50,000 abejorros por causa de pesticidas.
Estas actividades dañinas pueden conducirnos a una crisis alimentaria a escala mundial. Es importante incentivar prácticas agrícolas libres de químicos además de promover acciones que protejan y ayuden a los polinizadores y sus hábitats para incrementar su abundancia, mantener su diversidad contribuyendo al desarrollo sostenible en el sector agrícola y así apoyar a los apicultores.
Una forma de ayudar a estos pequeños abnegados y trabajadores, en lo personal, es sembrando plantas con flores que atraigan polinizadores como lavanda, limón, girasol o caléndula entre otras.
Y si quieren conocer más detalles sobre estas lindas criaturas, les invitó a leer el cuento “Las aventuras de Abi, la abeja” escrito por una servidora en el siguiente link: https://issuu.com/cienciaveracruz/docs/ld pág. 147. Editado por el consejo Veracruzano de Ciencia y Tecnología (COVEICYDET). Además si lo quieren recibir de obsequio en forma física, pueden pasar a la Oficina de este Semanario ESPRESSO en Rebolledo No. 29 segundo piso.
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