“¿Qué no los gobernantes salen del pueblo y por ende deben ayudar a éste?”. Fue la pregunta que nos hizo un joven veinteañero preveniente de Oregón, Portland (EU) en su visita a la tierra del dios Tigre.
Evidentemente la pregunta la lanzaba porque para él era evidente que la brecha económica entre la sociedad era muy amplia y escuchaba mucho que los políticos no respondían a las necesidades del pueblo.
¡Y vaya pregunta! Complicada de responder de manera sensata y acertada. ¿Por qué se da ese factor? Si los candidatos van saliendo de las filas de pueblo, y es algo que no podemos negar. Sobre todo a nivel municipal donde quienes aspiran a ser electos alcaldes son personas conocidas, para bien o para mal, dentro del municipio por el que aspiran a gobernar, ya sea por su trayectoria de trabajo dentro o fuera del municipio o por ser una familia de “renombre” y por tiempo o trabajo. Esto se presta mucho a la efervescencia donde salen a la luz todas las historias, inventadas o no, sobre el pasado de cada candidato.
Pareciera no ser así para aspirar a una diputación local, donde se debe representar un gran sector para asegurar votos en una demarcación geográfica más amplia, por ejemplo, haber sido presidente municipal, líder sindical o tener un respaldo económico o empresa fuerte que respalde el nombre en la boleta. Y por ahora no nos metemos con los candidatos a diputados federales, senadores, gobernadores y presidente de la república. Pero eso no quiere decir que, desde este sencillo pueblo, no seamos críticos y dudosos de lo que nos rodea, de todo.
Por ejemplo, uno de los actuales candidatos a la diputación ya fue presidente municipal, donde por cierto, al igual que la administración anterior a él, no acató una orden judicial para pagar un laudo laboral y por ello a los actuales ediles se les giró una orden de presentación, lo cual afecta a las arcas de ese municipio. Y si nos permite comentarlo, ¿cómo pretende legislar, hacer leyes, cuando no cumple las que ya existen?.
Pero no es de nuestro interés atacar o exaltar algún candidato, y ejemplificaremos con el reordenamiento vial que el actual ayuntamiento de Teocelo ha hecho alrededor del parque. Ha decidido que no se pueden estacionar vehículos alrededor de este, y para ello han colocado cubetas de plástico con 3 trozos de bambú como para adornarlos. Bueno, pues ahora, además de no poder circular por ese carril, tampoco se puede uno estacionar bien. ¡Ah! Porque déjeme comentarle que sigue habiendo quien se estacione en esos lugares, sólo que casi a media calle ya que si respetan las cubetas con bambú pero no el otro carril que es para circular.
Y bueno, ni hablar de los puestos ambulantes, los antojitos o taquitos de la calle tan comunes en nuestro país, esos también se pueden poner a comercializar, pero si usted visita Teocelo, no puede estacionarse ahí. Lo que ha generado que ahora gente con poco sentido común se estación en ambos lados de la calle 5 de mayo dejando sólo un carril central para que transite la carga vehicular de dos carriles.
Pues entonces, ¿si los que nos “gobiernan” salen de pueblo, ¿por qué toman este tipo de decisiones que afectan a todos? Será porque no hay una sanción o de verdad el poder económico es tan grande como para corromper a todo aquel que llega a un puesto de elección popular? Peor aún, ¿todo aquel que llega recibe presiones de unos pocos empoderados? Ejemplos hay mucho, es cuestión que como ciudadanos, cualquiera que sea nuestro municipio, preguntemos y exijamos por escrito, sobre la toma de decisiones de las comunas.
Que tenga excelente fin de semana. Si desea hacernos algún comentario los esperamos en nuestro blog: http://semanarioespressocoatepec.blogspot.mx/
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