El deporte debería ser parte fundamental en la vida de ser humano. En Teocelo se carece de infraestructura necesaria para la cantidad de población y para la diversificación de actividades deportivas que la población practica: beisbol, futbol, básquet, atletismo, etc.
Pero no es sólo la falta de espacios, el problema también es la mala calidad y el poco mantenimiento que se da a las que existen, limita que el deporte se realice adecuadamente; por ejemplo, la cancha de básquet de la Unidad deportiva “Prof. Raúl Olmos Martínez” tiene un techo enorme, que solo sirve para dar sombra porque cuando llueve la cancha se moja, además que es utilizado como cancha de futbol rápido. La pista para correr parece de asfalto, está tan apisonada que no parece reducir el impacto a las articulaciones de los atletas, además de que está invadida por vendedores ambulantes, niños que no son supervisados por un adulto, sucio, además de que no libra el campo de beisbol y hay que correr atrás del “cátcher” o por la zona segura detrás del home, donde no hay pista.
Existe un área con “aparatos” para hacer ejercicios como barra, balanceo, tipo gimnasio, pero desde su colocación no han tenido éxito ya que no están techados y ya están oxidados.
El campo de beisbol y futbol son lo mejor porque ambos tienen gradas, aunque las del primero no están techadas, y dependiendo de las jugadas las pelotas de ambos invaden el campo de juego del otro.
Cabe señalar que no hay supervisión por parte de nadie, policía o encargado.
Estos problemas son a diario, pero se agrava más los fines de semana, donde, aunque está prohibida la venta de alcohol, se consume como en fiesta de barrio. Triste y descaradamente se consume alcohol en un área que es, para exactamente lo contrario, frente a niños que desafortunada y seguramente copiarán esas reprobables prácticas. Es tan grande el cinismo de algunas personas y tan tolerada la situación que hay quienes sin mayor recato suben a las redes sociales que están tomando cerveza al ir a ver un partido.
Triste, peligroso y evidencia como sociedad. Estamos inmersos en prácticas que deberían ser rechazadas, pero desde Teocelo no parece haber el menor intento por mejorar la calidad de vida, ni por el gobierno, ni de la misma sociedad.
El otro campo deportivo “El Magueyal” es un chilatole de actividades donde unos se toleran con otros porque el espacio no es suficiente, los tableros de las dos canchas de básquetbol están deplorables y la cancha futbol rápido es utilizada para estacionamientos del algunas personas carentes de respeto por los demás; y los fines de semana es un santuario al alcoholismo y a la basura. Porque aunque las personas que asisten no deberían tomar o tirar basura, tampoco hay un gobierno que haga las actividades básicas de supervisión o vigilancia.
Y eso en la cabecera, en las localidades como por ejemplo en Independencia, Monte Blanco y Baxtla no hay unidades deportivas, un área de pasto es suficiente para decir que hay un campo deportivo, y ningún gobierno municipal les otorga infraestructura que eleve la calidad de vida de la población, y ésta no la exige.
El futuro que los niños tendrán, está siendo marcado por las malas autoridades municipales y por la propia población que no pone en marcha practicas sanas de convivencia y salud a los futuros adultos. Hay un dicho africano que dice: “Se necesita a todo un pueblo para educar a un niño”.
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