Urgen proyectos que detonen el Desarrollo Regional.-
En la administración pública existen muchos principios escritos y no escritos, uno de ellos, es el que dicta “existen necesidades ilimitadas y recursos escasos”; esta es una regla no escrita para todo aquel que llega a administrar los recursos públicos desde cualquier nivel: municipal, estatal o federal.
Ante esta realidad, se requiere que todo servidor público (Presidente Municipal, Gobernador y Presidente de la República) posea entre sus cualidades y capacidades, la de tener imaginación, innovación y capacidad de negociación para lograr la gestión y captación de recursos, adicionales a los propios.
Fuentes de financiamiento para proyectos existen, desde los recursos públicos de orden estatal y federal, pasando por recursos de asociaciones no lucrativas y ONG´s, hasta fuentes internacionales, tanto de gobiernos de otros países, organizaciones internacionales y organismos encargados de financiar proyectos de desarrollo como el Banco Mundial y la misma ONU.
Si existen diversas fuentes de financiamiento, entonces ¿Qué ha pasado? ¿Por qué no hemos podido obtener recursos para financiar verdaderos proyectos de desarrollo regional? ¿Qué ha faltado o qué ha fallado? Las respuestas pueden ser muchas y muy variadas, pero me concentraré en dos causas que considero más importantes: falta de capacidad de gestión y ausencia de proyectos ejecutivos.
Llegar a un puesto público no es tan difícil, como la necesidad de mostrar capacidad para responder en el momento adecuado; tener el conocimiento de dónde se está y hacia dónde se requiere llegar, pero, ante todo, el camino y que se requiere tomar para llegar al destino fijado.
Esto es precisamente lo que nuestros gobernantes han carecido, esa capacidad para salir en busca de los recursos que se requieren para financiar los proyectos que los municipios y la región demandan, es decir, faltos de capacidad de gestión y de negociación para obtener los recursos necesarios.
Por otro lado, de nada serviría abrir y obtener fuentes de financiamiento si no se tienen proyectos reales; esta situación ha sido muy recurrente, ya que el panorama de las necesidades se tiene claro y las opciones de solución también, sin embargo, esto no ha sido suficiente, en la forma de hacerlas realidad se han quedado cortos.
Es decir, la forma de cómo aterrizar estas soluciones y hacerlas realidad, es donde se ha fallado, por lo regular, por la falta de proyectos ejecutivos en forma, bien elaborados y soportados, con estudios técnicos y financieros que aseguren que las obras se realizarán de acuerdo a lo planeado y darán justa y verdadera solución a las necesidades de la población.
La región de Coatepec es muy variada, no obstante, presenta necesidades que son comunes y que generarían un impacto en el desarrollo regional de forma directa; en posteriores artículos, abordaré algunas de estas necesidades comunes que representan un impacto directo en la calidad de vida de la población.
Por ahora, es justo reflexionar sobre los dos aspectos importantes que limitan la obtención de fuentes de financiamiento para hacer realidad verdaderos proyectos de impacto en el desarrollo de la región de Coatepec. A manera de conclusión, es fundamental contar con servidores públicos capaces y con poder de gestión, y a la vez, generar un gran banco de proyectos ejecutivos reales que permitan responder a las necesidades de la población.
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