lunes, 22 de febrero de 2021

REFLEXIONES - Por: Héctor Hernández Parra.


Con el inicio próximo de las actividades electorales resulta necesario revisar algunos conceptos que escucharemos, expresados por algunos abanderados. 

 

Ha escuchado seguramente el concepto BIENESTAR. Resulta que es una manera de distribuir la riqueza por parte de algunos estados. Es un concepto utilizado en las ciencias políticas, que se concibe como un estado benefactor; el estado provee de satisfactores para cumplir derechos sociales para los habitantes de un país. Como una economía mixta, el estado deberá financiar a las instituciones para el cuidado de la salud y la educación con sus respectivos beneficios.   


Dice la historia contemporánea que algunas características de los estados del bienestar se traducen en la aparición de las pensiones, el seguro social, mismas que se desarrollaron en 1880 cuando se dio la industrialización en los países occidentales. Durante la gran depresión, la primera y la segunda guerra mundial, marcaron el inicio de las expansiones del estado del Bienestar. Es importante destacar que durante las fases históricas ya mencionadas se vivieron condiciones socioeconómicas difíciles apareciendo el hambre, el desempleo, etc.


Aunque en México no se habían agudizado problemas tan graves, con el cambio de sexenio y la llegada de Manuel López a la presidencia y al conquistar la mayoría absoluta en el congreso; se ha pretextado el combate a la corrupción y generar austeridad para crear el empobrecimiento de las instituciones,  llevar a la economía a situaciones que han conducido a la pérdida de fuentes de trabajo, la quiebra de negocios, la complicación en el crecimiento nacional y la caída de la riqueza.


Se han llevado los fondos para financiar a los electores pretextando una conducción hacia el bienestar, creando becas a estudiantes, a jóvenes, a campesinos, a personas adultas, a jubilados, a madres solteras, etc.


La apreciación de la problemática social y la promesa de eliminarla con la política del Bienestar y con la dotación de apoyos, según los gobiernos idealizados por el partido en el gobierno federal, ha identificado los principales problemas, como: pobreza, desempleo y formas de inseguridad social, salud, justicia penal, discriminación racial y religiosa.


Algunas ventajas de estar sujeto a criterios de los estados del Bienestar son:


Ser Humanitario: la idea de que debemos considerar que nadie debe sufrir innecesariamente.

Social; los programas sociales deben ser utilizados para promover objetivos comunes.

Político: Es una necesidad. Es el único modelo que ha demostrado en la práctica la capacidad de producir el crecimiento económico, como la cohesión social tan necesaria para alcanzar una óptima convivencia.


Algunas desventajas:


Individualista: El estado de Bienestar quita la libertad de elección para que el ciudadano no deba subvencionar el consumo de terceros.

Privatista: Los servicios que presta el estado del Bienestar podrían ser prestados con mayor eficiencia por el sector privado. En México se practica el concepto privatizador, argumentando corrupción.

Objetivista: El estado del Bienestar se basa en una falacia, ya que, si individualmente los ciudadanos no pueden permitirse un determinado nivel de bienestar, no hay razón para que lo puedan hacer colectivamente.  


El concepto del Estado Mexicano en su versión “chafa” del concepto del Bienestar, como todos los que llegan a detentar el poder, solo beneficia a las altas esferas. Ni bienestar colectivo, ni combate a la corrupción, ni primero los pobres, ni freno a la mentira, ni alto a la traición.


Correo electrónico   hectorhernandezparra77@gmail.com







No hay comentarios.:

Publicar un comentario