Sin lugar a dudas esta fase que se ha iniciado conjuntamente con los distintos procesos electorales que servirán para renovar en el país a la Cámara de Diputados y en Veracruz el Congreso y las presidencias municipales se convertirán en un serio e interesante ejercicio de participación ciudadana al que estamos invitados.
Nos toca analizar la conducta y los resultados, los agravios y malos modos que hemos cosechado de aspirantes a ejercer el poder y gozar de las delicias de las deformaciones del estado de derecho.
Un país caótico como resultado del ensayo y error de los niveles de gobierno y de la atropellada labor del poder legislativo que busca complacer las modificaciones legales dictadas por el alto mando.
El destacado académico, Doctor en Ciencias Políticas José Woldenberg ha mencionado la preocupación por el salto que el país ha dado hacia atrás, por la conducta enferma y equivocada del Presidente por intentar destruir las instituciones, organismos autónomos que representan el equilibrio ante los evidentes golpes al autoritarismo presidencial.
La oportunidad electoral para acotar el poder presidencial y eliminar el esquema de partido mayoritario se acerca, estamos viviendo las consecuencias de haber concedido el poder absoluto a un solo hombre y la mayoría de las decisiones a un Congreso servil a las locuras presidenciales a cambio de la posibilidad de la reelección defendida por Madero y Pino Suárez cuyas imágenes son utilizadas por un gobierno corrupto y mentiroso para ilustrar un escenario para las ruedas de prensa gubernamentales.
Como muestra de la perversidad gubernamental está la participación de los “Servidores de la Nación” integrados por brigadas de activistas, en la aplicación de las vacunas preventivas del COVID 19, o sea, la improvisación de la atención médica por operadores políticos a sueldo. El objetivo presidencial es priorizar la operación política en lugar de proteger sanitariamente al pueblo.
La estrategia de distribuir recursos públicos para comprar los votos vive una angustiosa realidad, los beneficiarios fallecen al infectarse en medio de la pandemia.
Desempleados, madres solteras, jóvenes, niños, empresarios y viejitos tienen contra la pared al descuido sanitario que el gobierno le ha aplicado al pueblo mexicano. El sistema de Salud colapsado.
La desesperada actividad de Marcelo Ebrard de adquirir vacunas válidas o no para la campaña. Lo suyo son las compras. (Como las pipas para resolver el huachicol en este sexenio de 4T).
Podemos recordar su negligencia al dejar honda huella en el Sistema de Transporte Colectivo Metro cuando fue Jefe de Gobierno del Distrito Federal, justo hace unos días, un incendio puso al desnudo el abandono burocrático de los anteriores regentes, salidos todos de la izquierda por cierto.
En menos de la mitad del régimen el gobierno de la Esperanza ha mostrado su incapacidad integral. El presidente se agrega a la lista inmensa de contagiados, esperamos verlo en una sala de espera de una institución pública para que viva en carne propia la realidad sanitaria nacional.
Correo electrónico hectorhernandezparra77@gmail.cm
De acuerdo, Ingeniero.
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